Aprovechando que he encontrado unos grelos estupendos en la frutería y que hace un frío que pela, me he decidido a preparar un reconfortante caldo gallego.
Es una receta tradicional no solo de Galicia, pues en Asturias y León existen platos muy semejantes a éste preparados con berza, repollo o lo que haya, o sea, un pote, como llamo yo a este tipo de guiso.
Los ingredientes básicos son la patata, la verdura, las alubias y el unto.Y es precisamente el unto, una grasa de cerdo ligeramente rancia, el ingrediente que otorga ese genuino sabor al plato. En cuanto a las carnes, suelen emplearse aquellas partes del cerdo que uno tenga en ese momento ya sea lacón, oreja, costilla o lo que sea.
Como decía mi padre: ¡esto resucita a un muerto!
Ingredientes (para cuatro personas):
- Un manojo de grelos
- 2 patatas
- 150 gr de alubias blancas
- Un trocito de unto
- Sal
- Un hueso de espinazo
- Un trozo de lacón
- Un chorizo
Preparación:
Desalar el lacón la noche anterior depositándolo en un recipiente con agua fría y poner las alubias en remojo. Lavar y trocear los grelos. Escaldarlos unos minutos en agua hirviendo, escurrir, tirar el agua y reservar. Pelar y trocear las patatas. Reservar. Poner en una cazuela el hueso, el lacón y las alubias. Cubrir con agua fría y cocer una hora. Quitar los huesos y agregar las patatas el chorizo y el unto. Comprobar el punto de sal. Incorporar los grelos reservados y cocer media hora más.
Buen provecho
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