Magdalenas altas

Estas magdalenas son las preferidas en casa. Mi hijo las denomina “magdalenas monodosis” porque dice que sólo se come una. Como ya comenté en la otra entrada de magdalenas, la forma de que queden así de altas se debe al molde empleado y a la temperatura del horno. Aquí empleo los moldes individuales de acero para flan, engrasados y forrados con dos tiras de papel para poder sacarlas mejor, y temperatura alta en el horno al principio de la cocción. Quedan así de hermosas.

Ingredientes (para 12 unidades, dependiendo del tamaño del molde)

• 3 huevos grandes
• 300 gr de harina normal
• 250 gr de azúcar
• 1/8 litro de crema de leche para cocinar, o leche entera
• 1/4 litro de aceite
• La ralladura de un limón
• Una pizca de sal
• Un sobre de impulsor químico (Royal)

Preparación:
Calentar agua en una cazuela y apartarla del fuego. Colocar sobre ella el bol ¡sin que llegue a tocar el agua! y batir hasta que blanqueen (la masa ha de parecer una crema espesa). Añadir la ralladura, la crema y el aceite. Batir medio minuto. Tamizar la harina con la sal y el impulsor químico. Verterla en la mezcla de poco en poco hasta que quede integrada. Llenar los moldes previamente engrasados y forrados con dos tiras de papel de hornear en forma de cruz hasta un dedo antes del borde. Rociar cada magdalena con un poco de azúcar. Ahora viene lo más difícil: conocer el horno propio para poder ajustar la temperatura correctamente. Cada uno es diferente. Yo las horneo a 220º durante diez minutos y luego bajo la temperatura a 180º, pero insisto, cada horno es un mundo.

Buen provecho